LO ÚLTIMO...

Todo se acaba, aunque no sea cierto, aunque no empiece nada, aunque sea una simple fecha, un simple número el que cambia... Pero nos hace falta. Hace falta saber que existe algo detrás de esa fecha, tener esperanza, creer puede haber una nueva etapa, de que va a comenzar algo que nos va a hacer cambiar. Que todo lo malo, cambiará, y que podremos ser más felices que en los últimos 12 meses.

Sin embargo, estas fechas, a algunos les sirven para reflexionar y sólo por eso, ya vale la pena la celebración que hacemos de ella. La reflexión de lo que nos ha pasado y la esperanza de lo que vendrá, de nuestros propósitos y buenas intenciones...

A mí, de momento, me cambia un poco la vida al año que viene. Y es que el día 3, empiezo trabajo nuevo, y no sé bien lo que me espera. Por eso, mañana, el último día del año, es también mi último día de trabajo en el que he estado durante casi 2 años y en el que tanto he aprendido.

No quiero reflexionar mucho más, la fecha y el inicio de año es pura coincidencia. Una etapa acaba, pero comienza otra de forma inmediata, sin tiempo para pensar, como el resto de cada semana.

Es curioso, siempre necesitamos poner inicio y fin a las cosas. Si no, yo sería la primera que me volvería loca...