AHOGADA
Sólo salvo una parte del día de hoy, en la que he podido sonreir, sentir y ser un poquito feliz. Sin embargo, al llegar a casa no puedo evitar sentirme mal, como la última persona de la tierra, como la que merece sufrir por mis actos, la víctima. Quizá sea mi actitud la que me haga sentir así, una corriente que llevo arrastrando hace ya bastantes días, pero no saber del futuro es algo que... puede conmigo. Ya no quiero tenerlo todo controlado, pero esta gran incertidumbre es demasiado. Me siento ahogada, vacía y sola.
Ya no es arrepentimiento, es impaciencia, debilidad e impotencia.
Tengo 3 largos días por delante, sin planes, vacíos y solos para mí. No quiero hacer nada. Sólo dormir, leer y no sufrir. Veremos qué pasa.
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